A1-. Pillar Box listen / download
B1-. Tramway listen / download
B2-. Star listen / download
año: 1992
sello: Elefant Rds.
referencia: ER-103
Por diversas circunstancias, en estos últimos días han aparecido en conversaciones con colegas y amigos los nombres de los capos de dos de los sellos más importantes del indie pop nacional, Luis Elefant y Mateo Siesta. El primero por su sorprendente y merecido pregón en las fiestas de su pueblo (Bembibre) de lo cual me alegro enormemente y el segundo por el despertar de su letargo y comenzar a aparecer en redes sociales repasando algunos de los discos embláticos del perezoso sello.
Los que me conocéis ya sabéis el cariño y aprecio que le tengo a ambos por todo lo vivido en aquellos intensos primeros 90s, una época en la que las redes sociales eran suplidas por un contacto directo con todos aquellos que formaron parte de esa escena emergente. Reuniones, cenas, cubeteos, conciertos, películas, paseos, fiestas... hacían que el trato con ellos fuese muy cercano y directo y se llegase conocer muy bien a cada uno de ellos. Pese al caracter aparentemente introvertido y serio de Luis, fue con el que tuve trato más estrecho y cercano, era una persona muy transparente, pasional, que dejaba ver sus inquietudes, sus proyetos, sus gustos y compartía todo aquello que le llegaba que no era poco. Sin embargo Mateo que parecía más divertido y abierto, resultaba más opaco e imprevisible en todo lo que le rodeaba, vivía un poco al margen de todo lo que se movía a su alrededor y se centraba más en sus proyectos. Con sus diferentes características, lo que a ambos les unía era su pasión por la música y en concreto por el indie pop británico mayoritariamente. Mateo llegó a Madrid siendo un enamorado de Sarah Records, aparte de todos los clásicos previos como New Order o Wedding Present por poner dos ejemplos. Luis disfrutaba más con grupos más saltarines y acelerados como Talulah Gosh o los Haywains y también llevaba en la mochila su pasado más punk y siniestro. Amaban (aman) la música y es su vida, compartían su amor por los mismos grupos aunque luego en sus respectivos sellos tomaran caminos diferentes.
Mientras Luis ya empezaba a moverse con fanzines, maquetas y conciertos a finales de los 80, Mateo comenzó su aventura discográfica un poco más tarde, ya entrados los 90. Las primeras referecias de ambos sellos son bastante similares en lo musical, grupos internacionales que despuntaban en el panorama del indie pop, mezclado con grupos nacionales emergentes que seguían esa estela. Aún así siempre hubo diferencias entre ambos, mientras Elefant era más directo, más pasional, más atropellado, Siesta era más meticuloso, metódico y detallista. A Elefant llegaba una maqueta cualquiera y si le gustaba, no dudaba en sacar un 7" rapidamente, quizá no pulía demasiado el producto, eran canciones en bruto y los diseños eran todo lo DIY que se suponía de aquellos años de letraset y fotocopias. Siesta dedicaba más tiempo a la elaboración del producto, se aseguraba de que tanto el sonido como la presentación estuviese a la altura. Al haber dos sellos de similares características, a veces resultaba confuso qué banda iba a cada sello, Moving Pictures quizá pegaban más en Elefant o Le Mans se acercaba más al estilo Siesta pero por circunstancias puntuales iban a uno u otro sello. Yo escuché la primera maqueta de La Buena Vida con Luis y la verdad es que sonaba a rayos y sin embargo Mateo vio el potencial y les sacó en cuanto pudo un primer single, el resto es historia. Fuera como fuese, ambos tenían esa ilusión y energía para sacar discos y dar a conocer todos esos grupos que empezaban a salir como setas. Hablo de los 90, ya a finales de siglo Siesta dio un volantazo hacia sonidos más exquisitos, elaborados, misteriosos y elitistas mientras Elefant resultó un pequeño cajón de sastre donde se podía encontrar algo de lo que publicaba al principio junto con cosas más comerciales, alguna apuesta más arriesgada y dando muchas oportunidades a grupos muy jovenes. Yo esa epoca (los últimos 25 años) ya no los he vivido con la misma intensidad.
Lo que les une hoy en este post, es el single de Panda Pops, tercera referencia de paquidérmico sello publicado en 1992 y que coincidió en el tiempo con el single de debut del sello dormilón protagonizado por Tramway, grupo que surgió de las cenizas de Panda Pops y que casualmente se presentó en el concierto de debút en Madrid de La Buena Vida en el Siroco. He de decir que jamás he visto tanta maqueta de grupos independientes como las que he visto en casa de Luis, intercambiaba con un montón de gente, escribía a todos los grupos, compraba todos los fanzines, era incansable, siempre en busca de esa canción que le emocionase o impactase. Eso debió pasar con Panda Pops a los que, ya llamándose Tramway y grabando para Sarah Records, les pidió unas canciones para publicarles un single póstumo, el single del que hoy hablo.
Con el típico diseño de la portada de trazos rectos y geométricos habitual en los posteriores discos de Tramway, con esa maquetación con Letraset (impresionante también la colección de letraset que tenía), el primigenio y precioso logo del elefante, la mítica dirección postal de la casa de sus padres en Bembibre y cargado de una enorme dosis de cariño e ilusión, salió a la venta este disco en el año olímpico. Se trata de una canción de su maqueta y dos temas en directo. La cara A muestra lo que caracteriza a muchos de los grupos que grabaron para Sarah Records, canciones lánguidas, melancólicas y perfectas para esas tardes otoñales grises. En esta ocasión con el curioso inicio de la megafonía sonando en una estación de tren que podría ser la preciosa estación de Brsitol. Utilizan una fórmula que hemos visto en grupos como The Sea Urchins, Blueboy, Sweetest Ache o Brighter. La cara B esá grabada en directo en el 89 y entre las conversaciones del público se abre paso la actitud sosegada e intimista del grupo de Bristol, la canción Tramway parece grabada a 25rpm, ninguna nota se sale del guión marcado, la voz de Chris marca el ritmo y parece ir frenando todo el rato a los demás. Cierra el 7" Star, mi canción favorita, donde aceleran un poco el paso lo cual hace que la canción apenas dure un par de minutos. Dos minutos exquisitos, elegantes y encantadores. Un precioso legado en forma de 7" que no mucha gente recuerda ni reivindica.
Lo siguiente ya fue el mencionado single de debut de Tramway en Siesta (que ya comenté aquí en 2010) tras sus dos primeros singles en Sarah Records y un posterior precioso 10" donde el sonido dista bastante de sus primeros trabajos al incorporar una protagonista farfisa y unas melodías más alegres y coloridas.
Sirva este post como homenaje a estos dos grandes referentes de la música independiente en España.